Primera mujer en subir el Everest por la cara Norte y Sur

El Himalaya es la cordillera dónde se encuentran la mayor parte de los 8000 o cimas más altas del planeta, el otro macizo dónde está el resto es el Karakorum. Cathy O’Dowd es la primera mujer en subir el Monte Everest, el pico más alto del planeta con 8.848 metros, por la cara Sur y Norte.

Hablando de Cathy O’Dowd diremos que es una alpinista sudafricana que actualmente vive en el país de los Pirineos como también se conoce a Andorra. Esta mujer ha logrado hacer historia, escalando 2 veces el Everest por dos rutas distinta, eso sí, tras 4 intentos. Aunque ella es la primera en decir que no solo es himalayista sino sobretodo montañera porque no obtiene más alegría o felicidad por estar en un ocho mil que por estar en los Pirineos corriendo, escalando o haciendo cualquier otra actividad, ante todo lo que ama es la montaña.

Quizás un poco por fortuna o casualidad empezó su aventura de ir a las montañas más altas del mundo, viviendo en Johannesburgo y siendo ya aficionada a la escalada, vio un anuncio en un periódico dónde se buscaban escaladores para formar parte de la primera expedición sudafricana al techo del mundo, entre más de 200 mujeres fue ella la seleccionada para ir al Everest.

Su suerte había cambiado para siempre y las montañas más altas de la tierra serían algunos de los retos montañeros más importantes para ella. Pero para una alpinista de este nivel, la trayectoria deportiva no siempre es un camino de rosas, ha perdido compañeros de cordadas y amigos como Bruce Herrod que pereció en el descenso de esta primera incursión sudafricana al techo del mundo. A ella, el Everest, le ha dado momentos de felicidad como seguramente otras cumbres, pero también tristeza e impotencia por no poder hacer lo imposible, como en el intento a la cumbre de 1998 dónde tuvo que abandonar para socorrer a una alpinista americana, la cuál finalmente murió, su experiencia y su libros nos recuerdan que la montaña es el mejor lugar del mundo pero que debemos respetarla.

Finalmente, en 1999, Cathy O’Dowd escribió un poco más en la historia del Everest (ver artículo Curiosidades del Everest) consiguiendo ser la primera mujer en lograr escalar la cima más alta del planeta por dos de sus caras.

Su experiencia en el Himalaya, le ha servido para plasmar en 2 libros, un punto de vista muy interesantes extraídos de su experiencia en el Everest, muy recomendables: Just for the love of it (Por amor a la montaña) y Free to Decide (Libre para decidir) escrito junto con Ian Woodall.

Cathy O'Dowd

Ian Woodal y Cathy O’Dowd

Cathy O’Dowd, ha conseguido más éxitos en el Himalaya, que parece que todavía no es cosa de mujeres o al menos el % de participación con respecto a los hombres es bajo, por eso, quizás conseguir en el 2000 ser la cuarta mujer en lograr escalar el Llotse tiene su mérito y valor.

Cabe destacar que Cathy va adquiriendo cada vez un mayor compromiso con el montañismo, y por supuesto un mayor reconocimiento (nominado su documental de Nanga Parbat por la Ruta Mazeno en el piolet d’0r 2012) su superación la consecución de retos y la motivación, le llevan en el 2003 a intentar abrir una nueva ruta en la temida cara Este del Everest. Y para el mundo del alpinismo, tiene mucho más valor el intento de lo nuevo y el compromiso con la dificultad que no las infinitas repeticiones por las clásicas saturadas de personal. Un ejemplo, es que estos días, estamos viendo imágenes lamentables de como las expediciones hacen cola y se forman auténticos atascos para escalar el Everest por su vía normal, parece que subir hasta aquí es cosa de dinero y nada más, pero seguro que tarde o temprano lamentaremos esta manera horrible de entender la montaña o el montañismo.

Me gustaría destacar brevemente, porque esto merece otro artículo, el importante éxito conseguido al formar parte de la primera expedición en alcanzar el Nanga Parbat por la arista Mazeno, en el 2012, nunca antes conseguido por ninguna otra expedición en el mundo, y el éxito además fue que los 6 componentes del equipo pudieron regresar a su casa, sanos y salvos, tras algún susto, tobillo roto y agotamiento general. Se demuestra una vez, más que Cathy O’Dowd cuando le han dado la oportunidad en el complicado mundo del alpinismo, ha escrito una verdadera historia llena de belleza y proeza.

Actualmente, podemos tener la suerte de ver Cathy O’Dowd en conferencias de montaña y proyecciones que os aconsejo que no os perdáis, alpinista con mucha empatía y facilidad para cautivar al público y enamorarnos, más si cabe, de las montañas.

Gracias por las fotografías a cathyodowd.com

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