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Pico Aspe (2640 m)
El Pico Aspe con 2640 m es la cumbre más alta de la zona que vamos a visitar hoy, situada entre el Valle de Aisa y el Valle de Canfranc en el Pirineo de Huesca. La ruta más concurrida es desde el Valle de Aisa, pero también hay otro itinerario conocido ascendiendo desde Candanchú.
La crónica de hoy es desde el Valle de Aisa, pero he disfrutado tanto con esta excursión a pesar del tener un tiempo algo inestable que he decidido en el futuro subir a esta cima por la otra vertiente, por Candanchú.
Inicio y datos básicos
Para llegar al punto de inicio tenemos antes que pasar por la carretera que va hacia Aisa, dejaremos este pueblo escondido en la naturaleza para seguir la carretera Pico de Aspe hasta que una valla nos impida el paso.
Dejamos el vehículo aparcado al margen de esta pista, no hay un aparcamiento específico pero es suficiente para unos cuantos coches, más de una decena.
Datos básicos ascensión Aspe
Distancia: 9,9 km
Desnivel +: 1.157 m
Tiempo empleado: 5 h 47 minutos
Dificultad: Moderada. La zona de Karst es la más técnica por alguna trepada o destrepada, también al llegar a la Brecha del Aspe hay que destrepar un paso, pero es fácil para la gente acostumbrada a moverse en alta montaña.
Track GPS Ascensión Aspe por el Valle de Aisa
Descárgate track aquí:
Crónica de la ascensión al Pico Aspe
Una montaña a la que tanto Bego como yo le teníamos ganas, Jose le faltaba en su haber y Susana tenía ganas de acompañarnos, ella ya lo había ascendido escalando por la Arista de los Murciélagos. Lástima que el día hoy es algo inestable y en la cima nos ha cogido niebla y no hemos podido disfrutar totalmente del paisaje de nuestro alrededor.
Nos hemos levantado a las 5 de la mañana, estamos alojados en el albergue de Yebra de Basa, punto intermedio para mañana ir a hacer el Anayet y Vértice de Anayet. Después de desayunar Jose, Bego y yo vamos a buscar a Susana que nos espera en su furgoneta.
Aproximadamente a las 7:25 h empezamos a caminar, sin prisas pero sin pausa, no queremos catar la lluvia que se pronostica por la tarde, el sueño nos acompaña en parte del camino como también las ganas de siesta que se pronostica que echaremos.
Hemos sido los primeros en aparcar al final de la carretera Pico de Aspe aunque los segundos en cruzar la valla que nos lleva por la pista paralela al Rio Estarrun, primero está asfaltada y sube con contundencia después se suaviza y desaparece el cemento.
A la altura aproximada, del Refugio de Saleras (que dejamos a nuestra izquierda alejado unos metros) encontramos un poste indicativo, tomamos a la derecha y cruzamos el torrente seco.
El paisaje que nos acompaña es bucólico, tanto que vemos el ganado de alta montaña en los prados bajos, una serpiente adormilada por el frío de la noche, algún rebeco en la zona de Karst y algo más adelante veremos la flor de Edelweiss, siempre me emociona ver esta flor, es única y escasa, cada vez más.
Hablando y hablando progresamos rápidamente sin darnos cuenta ni del desnivel. Estamos en agosto y este año ha nevado poco, ahora ya no queda nieve que pisar aunque es una zona donde puede aguantar tiempo, a tener en cuenta por el material a llevar.
Entramos en una zona estrecha que trepamos sin dificultad, es corta y baja, a la izquierda dejamos unas paredes contundentes, seguimos subiendo por una senda en la zona herbosa hacía una de la zonas más singulares e interesantes del día, al menos para mí, la zona kárstica.
Encontramos una nueva estrechez, embudo o paso para entrar en la zona kárstica. Nos orientamos hacia la izquierda que mantendremos hasta acercarnos al Collado de Aspe (2427 m) o Paso de la Garganta de Aspe sin llegar. Subimos por la izquierda y por la zona alta de los Karst. En la vuelta haremos una pequeña variante.
La progresión por la zona Kárstica es entretenida, esta sucesión de roca agujereada, porosa, agrietada, cortante a veces la hace entretenida a la vez que especial. Aquí es imposible que encuentre agua, se cuela profundamente por las entrañas de este curioso lugar. Me recuerda otra zona Kárstica que vi camino a la Mesa de los Tres Reyes, en esa ocasión también iba acompañada de Jose, como me gusta su compañía siempre se aprenden cosas nuevas.
No tardamos en salir de la zona kárstica para afrontar la subida final al Aspe, seguimos hitos y track GPS cuando tenemos dudas, la tendencia es subir hacia la derecha.
Llegamos a la Brecha de Aspe (2581 m), hay que destrepar muy fácil un par de metros. La meteorología va cambiando y nos invade la nieva, humedad y algo de frío pero queda poco y la moral sigue siendo muy alta.
No tardamos en llegar felices a la cumbre del Aspe, no nos acompañan las vistas 360 grados. Susana no nos puede enseñar la Arista del Murciélago que hizo anteriormente para llegar al Pico de Aspe o también conocido como Pico de la Garganta de Aisa, una lástima. Nos hacemos fotos individuales y de grupo antes de bajar.
Repetimos camino de vuelta, antes paramos unos minutos a comer alguna cosa en la Brecha del Aspe, protegidos del viento pero no del frío, yo aquí es donde más lo he notado en todo el día, afortunadamente nos ponemos en marcha rápido.
Subimos el paso técnico pero sencillo de la Brecha del Aspe. Y bajamos por la ladera de la montaña. Al llegar casi al Collado de Aspe decidimos a bajar más hacia nuestra izquierda para hacer una circular en la zona Kárstica, esto va a suponer bajar por una chimenea, es el paso más técnico del día pero lo superamos bien todos.
A la altura de Las Llanas y ya casi saliendo de los Kárst recuperamos el camino hecho a la ida y que repetiremos a la vuelta hasta el coche, curiosamente sale el sol y acabaremos con calor. Aún así, aprovecharemos para estirar y cotillear un libro de “tres miles” que llevo en el coche antes de volver a Yebra de Basa, no tenemos fin y siempre queremos más.
Ha sido una jornada extraordinaria entre bonita gente para recordar, a la vuelta vamos pensando unos en la siesta y otros en comer alguna cosa, yo más en la siesta pero ya que estoy también como. De camino, Jose me habla de una “trilogía” que tiene como objetivo subir tres picos de la zona haciendo una circular: Aspe (2640 m), Llena de la Garganta (2599 m) y Llena del Bozo (2566 m).
Me gusta acabar una jornada pensando en nuevos proyectos a compartir con los compañeros de ruta, eso es que te lo has pasado bien, eso es que amas las montañas, eso es que anelas compartir y volver a repetir nuevos lugares.
