Índice Contenido
Montpius con nieve (invernal)
Datos básicos
Punto de inicio: N-230 PK 158. Viniendo desde Vielha te queda el aparcamiento a la izquierda, caben 2 o 3 coches. En el caso de que estuviese lleno, otra opción es hacer el itinerario desde el pueblo de Casau.
Distancia: 12,05 km.
Desnivel +: 966 m.
Tiempo empleado: 7 h 30 minutos. El tiempo empleado siempre es orientativo, teniendo en cuenta que nosotras utilizamos raquetas de nieve y crampones (pala final), y no esquís, a la vuelta utilizamos crampones aunque en tramos hubiera sido mejor las raquetas, el cambio de material en días fríos de invierno es tan farragoso que se hace lo menos posible.
Dificultad: Fácil/moderado, es un pico ideal para iniciarse con raquetas, las dificultades técnicas se presenta especialmente al final.
Crónica de la ascensión invernal al Montpius
Nuestro tercer día en la Vall d’Aran, el primer día hicimos una ruta maravillosa: Circular hasta el Banhs de Tredós, con la fortuna de conocer el Bosc Negre y el segundo día, acertamos con la ascensión al Montcorbison desde Vielha, al finalizar no podíamos estar más felices de haber tenido la suerte de explorar un fantástico bosque y culminar una ascensión estupenda, adornada con una nieve desde casi los primeros pasos.
Llegamos algo más pronto al punto de inicio que otras jornadas, el día es tan frio y el lugar donde dejamos el coche tan lúgubre que en cuestión de segundo quedamos congeladas.
Nos equipamos rápidamente y salimos sin pausa por la pista que nos lleva a la Borda de Sabater, ya encontramos hielo desde el principio aunque pronto se convertirá en nieve. El punto de inicio está a 1300 m de altura.
Pasamos la explanada de la Borda de Sabater cubierta con mucha nieve siguiendo unas pisadas de días anteriores, y seguidamente entramos en el bosque. Este bosque no nos parece tan lucido como el Bosc Negre de la Vall d’Aiguamòg o el bosque que encontramos camino al Montcorbison pero es que el nivel está muy alto.
Atravesamos el bosque para salir a una zona despejada a 1625 m, se encuentra aquí la Cabaña de Pomarola. El bosque ya va desapareciendo, quedan algunos árboles más en la subida, ahora pasamos a entrar en un mundo blanco de lomas suave.
No vemos huellas de raquetas de otros montañeros pero sí, grandes trazadas de los esquiadores que parecen haber ido danzando en la nieve polvo de las nevadas de los últimos días, se intuye que se ha gozado y mucho en estos descensos.
La subida es suave pero poco a poco vamos avanzando, pronto llegamos a la Cabana de Comests a 1935 m. Nos queda una pequeña subida por una pala de nieve sencilla y giro hacia la derecha para encarar una zona desde dónde ya veremos el Montpius, también el Letassi y el Montcorbison más hacia la derecha, este último nos parece tan bello, ayer nos enamoramos de esta ascensión y hoy su visión nos despierta una justificada felicidad.
Al llegar a los 2050 m entramos en una parte de transición, un sube y baja siempre muy agradable que normalmente transcurre por la zona alta de las lomas, parece que nos acercamos al Montpius pero está más lejos de lo esperado, estamos en el km 4 de la ruta y hay que llegar hasta el 6,1 km.
Este tramo sosegado se hará mejor a la ida que a la vuelta, que ya se notará el esfuerzo en las piernas, hay acumulación de nieve y se requiere mayor desgaste energético para avanzar.
Estamos más cerca de la cumbre, vemos una cornisa en la cresta cimera algo alejada todavía, hay que cruzarla para ascender al Montpius, también observamos unas palas muy cargadas de nieve que queremos evitar. Para no subir por la zona con más cantidad de nieve y con mayor peligro de aludes hacemos un flanqueo lateral que se hace muy incómodo con raquetas, aquí sería recomendable ir con crampones. De manera no muy elegante conseguimos llegar hasta una zona de piedras, hierba y algo de nieve ausente de peligros.
Ahora, estamos muy cerca de la cumbre, un pequeño flanqueo y atravesar la cornisa o bien lo que yo quiero, trepar por las rocas de manera directa hasta la cima. Esta opción la veo factible pero es incierta, no se ve la cumbre y no sabemos que encontraremos después de las rocas, igualmente, yo me empeño en probar a subir por aquí. Intento subir unos cuantos metros pero Bego con su mirada claramente no me da su apoyo, para no ir cada una por un lado, decido que la mejor opción es volver a el itinerario más pisado, ponerse crampones y atravesar la cornisa.
Por la cornisa, han pasado bastantes montañeros así que es mucho más fácil y seguro de lo que aparentaba, después de atravesarla seguimos por la cresta cimera haciendo nuestra propia huella más al interior de la montaña. No queremos dar un paso en falso y que se rompa la cornisa.
En unos minutos llegamos a la cumbre del Montpius, hace tanto frio que no puedo hacer las fotos de cima, le paso el móvil a Bego y recupero el calor en mis manos, después consigo hacerle a ella alguna foto y una de equipo. Ahora es ella quien se recupera de sus manos frías.
Las vistas son muy bellas pero no podemos aguantar el frio intenso y aunque no hace mucho viento, hace lo suficiente para que la sensación térmica sea por debajo de -15 grados, es hora de volver.
Bajamos por el mismo camino de subida, superando con tranquilidad la cornisa rota del paso de los montañeros. Ahora iremos con crampones toda la vuelta, aunque en las zonas más suave nos hundimos, avanzamos relativamente fácil.
Al llegar al coche, solo nos queda que reflexionar de ser afortunadas por estar de nuevo en un lugar fantástico, en un buen día y con buena compañía. Nos vamos para casa muy felices de haber conocido un poquito más la Vall d’Aran.
Track al Montpius con nieve
Descárgate el track aquí: Montpius con Nieve