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Cueva de los Arnales o Cueva del Molino
La cueva de los Arnales o cueva del Molino se encuentra en el municipio de Tella-Sin, en la aldea Lamiana. Tiene un recorrido de 350 m y 25 metros de desnivel. Es una cavidad de gran interés por la cantidad de concreciones que contiene y únicamente se necesita casco y frontal como material obligatorio. Puede ser recomendable llevar algo de seguridad para los tramos con cuerda o cascada final para asegurar.
Esta cueva tiene una galería principal con diferentes salas y con algunas pequeñas galerías laterales que acaban en la principal.
Existe un par de resaltes equipados con cuerdas fijas para acceder a la parte superior que, aunque fácil, requieren práctica y habilidad en estos menesteres montañeros y unos pasamanos y cuerdas fijas para bajar (se podría hacer a la inversa pero recomiendo subir por la derecha), siempre se puede llevar material para asegurar.
Cómo llegar y datos básicos de aproximación
Hay que subir por la carretera hacia Lamiana y acabar por una pista. Justo en un cruce donde se bifurca la pista podemos dejar nuestro vehículo aparcado en un espacio a la izquierda.
Desde el aparcamiento, caminamos 15 – 20 minutos hasta la boca de la Cueva de los Arnales. Primero, subimos a pie por una pista en peor estado que va a una nave, aquí a la derecha sale el sendero que seguiremos hasta la Cueva del Molino o Arnales.
Distancia: 0,68 km, Desnivel +: 75 m, Tiempo empleado: 15 minutos, Dificultad: fácil.
Track GPS aproximación Cueva de los Arnales
Descárgate el track aquí:
Crónica Cueva de los Arnales
Afrontamos esta nueva aventura, esta vez por la tarde después de realizar por la mañana otra cueva, la Cueva 5 de agosto en el Valle de Chistau. A la tarde, tenemos pensada esta cavidad que además es conocida por la cantidad de formaciones.
Dejamos el coche y caminamos 15 minutos hasta el acceso, se le conoce como Cueva del Molino porque en su entrada tiene una construcción para la recogida de agua.
La entrada es una boca gigante que se va estrechando al acceder al interior, no es una cueva claustrofóbica pero sí que en la entrada hay agacharse para ir progresando. Es una cueva fácil de iniciación si omites las galerías superiores y los tramos equipados.
Al entrar, vemos un torrente de agua que emana de la misma boca de la Cueva de los Arnales, es una cueva viva que gotea y que corre el agua, vas a acabar mojándote casi seguramente, solo te podrían salvar unas botas de agua.
La primera sala tiene unas preciosas formaciones, si decides mojarte ya entra por el curso del agua y no tendrás que hacer tantos malabarismos para acceder. Después toca acceder por unas estrecheces con forma de cañón producido por la surgencia del agua, aquí sí o si tienes que mojarte.
Llegamos a la galería principal de impresionante techo y bastante ancha, ya caminaras erguido. Llegamos a una cascada o tobogán de agua de varios metros infranqueable, a la derecha unas cuerdas fijas nos ayudan a superarlo por ese costado, a la izquierda un pasamanos nos servirá para volver a esta sala.
Vamos resiguiendo cuerdas para ir al piso superior y superar la cascada de agua, todo es la misma galería. Una de estas cuerdas es algo más vertical para superar una canal estrecha después bajamos fácil por otra cuerda a la sala superior de esta misma galería, donde en el lado contrario y justo encima de la cascada a superar hay un pasamanos que nos ayudará a bajar.
Antes de tomar el pasamanos para bajar algo expuesto donde hay que poner los sentidos alerta, en esta sala de techos altos y espaciosa vemos una cascada final que subimos a la mitad para observar el resto de la cavidad, como parece que acaba aquí no trepamos más, resbala subiendo y no queremos exponernos a la vuelta bajando (no llevamos material para asegurar).
La cueva de los Arnales nos ocupará 1 h 30 minutos o 2 horas, se pierde la noción cuando te rodeas de tanta belleza, es espectacular su recorrido las concreciones de origen Kársticas como los gurps (terrazas en el suelo de gran belleza y curiosas), estalagmitas, estalactitas, columnas, banderas o coladas muchas concreciones.
Un día maravilloso, en un lugar singular, con una gran compañía. Dos cuevas muy diferentes, la cueva 5 de agosto y la cueva de los Arnales pero ambas nos han emocionado. Las montañas por fuera o por dentro son simplemente increíbles.