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Avenc de Joan Cabeza y Avenc de Sant Roc
El Avenc de Joan Cabeza y el Avenc de Sant Roc son de dos cavidades independientes pero que por proximidad entre ellas nos animamos a hacerlas el mismo día. Siguiendo con las propuestas de Rafel, hoy el objetivo principal es el Avenc de Joan Cabeza, y si estamos a tiempo y la motivación nos acompañaba haríamos como segunda opción el Avenc de Sant Roc, otra sima que está en nuestra lista de cavidades a realizar. Ambas cuevas están en Parque Natural del Garraf cerca de Begues.
Datos básicos y punto de inicio
Hemos dejado el vehículo en una pista forestal del Parque Natural del Garraf, concretamente en un apartadero justo para un coche fuera de la pista para evitar ser multados.
El lugar donde hemos dejado el vehículo es la pista de La Plana Novella a Begues, a 1,4 km, antes hay un aparcamiento más grande habilitado para los montañeros es una opción si este rincón estuviese ocupado.
Este aparcamiento está a 400 metros desde la rotonda de Begues de la carretera de Begues a Gavà C-535 por donde hemos accedido.
Desde donde dejamos el coche tenemos a pie aproximadamente 700 metros a la sima de Joan Cabeza, del Avenc de Joan Cabeza al Avenc de Sant Roc hay 600 metros aproximadamente, y del Avenc de Sant Roc al coche 700 m aproximadamente.
Distancia: 2 km. Desnivel +: 100 m.
Track aproximación a pie Joan Cabeza y Sant Roc
Descárgate track aquí: Aproximación Avenc Joan Cabeza y Avenc Sant Roc
Crónica al Avenc de Joan Cabeza y Avenc Sant Roc
Hemos quedamos relativamente pronto para lo cerca que más o menos lo tenemos de casa, aun así, cruzar Barcelona entre semana a las 7 de la mañana hace que perdamos algo de tiempo, pero hoy no tenemos excesiva prisa así que las actividades como casi siempre nos la tomaremos con calma y gozando mucho de ellas.
Aparcamos el vehículo fuera de la pista forestal justo delante del cruce de caminos por donde empezaremos nuestra aproximación a estas magníficas cavidades.
Avenc de Joan Cabeza (-67 m)
La primera sima elegida, será el Avenc de Joan Cabeza, con su pozo de -49 m que seguro que va a ser un gran esfuerzo remontarlo, por eso, preferimos explorarla antes que el Avenc de Sant Roc.
Rafel se encarga de la instalación y de bajar primero, entra en el pozo oscuro tras superar una boca no muy grande pero suficiente para entrar con comodidad, aproximadamente 1,5 m x 0,5 m.
El pozo es totalmente vertical, primero pasas cercas de las paredes adornadas y después se va abriendo para hacerse más amplia. Miro a Rafel como se aleja en la oscuridad poco a poco, me parece no tener fin su descenso a las profundidades de la tierra. Finalmente oigo dos pitidos, señal que hemos acordado para que pueda empezar a bajar.
Siempre que entro en una sima me impresiona, hoy además estoy sola, sola con mis miedos pero motivada por descubrir la famosa belleza del Avenc de Joan Cabeza.
Empiezo a bajar y nada más entrar se me apaga el frontal, llevo dos focos de reserva pero ninguno es para el casco, dura unos segundos el nerviosismo de tener que bajar a oscuras porque de nuevo el frontal funciona.
Bajar es sencillo sin embargo casi no miro el entorno, solo quiero llegar a esa luz lejana que me espera al final del abismo, Rafel me va animando, siempre lo hace pero quizás hoy se debe sentir solo en la oscuridad.
Cada vez me voy relajando más hasta el punto que ya puedo pararme y esperar a que Rafel me haga fotos o me firme, levanto la vista y disfruto de esta riqueza visual que me envuelve.
El pozo de descenso está tapizado por coladas que lo hacen atractivo, se puede bajar de una tirada mucho más cómodo porque es aéreo pero hay un par de puntos que pasa cercano a las paredes donde se puede fraccionar el descenso/ascenso para evitar, si el grupo de espeleólogos es grande, que se haga lenta la subida.
Nosotros como somos dos haremos una única tirada de 49 m y nos evitamos hacer cambios incómodos en plena oscuridad.
Al llegar abajo la planta es espectacular, con la planta en forma de pequeña montaña en el centro típica en las simas, esta sala principal tiene unas dimensiones aproximadas de 20 m x 7 m.
Hay dos galerías secundarias en cada extremo de la sala principal, la primera y más interesante (en la topografía es la sección A), tiene un resalte de 3 m donde instalamos una cuerda para mayor seguridad sin ella es exponerse innecesariamente, puedes bajar con material o simplemente descolgándote de ella, el siguiente resalte es de 2,5 m pero es más estrecho y no hace falta ponerse el STOP para bajar. Se llega a la profundidad máxima de – 67 m.
Llegamos a esta sala inferior donde podemos estar de pie disfrutando de concreciones singulares, algunas concéntricas parecen corales, otras me recuerdan coliflores y otras son preciosas columnas, estalactitas y estalagmitas, en conjunto supone una gran riqueza en su interior.
La sala inferior mide aproximadamente 15 m x 4 m. Hay que tener cuidado al moverse ya que en el suelo hay formaciones extremadamente delicadas. Con delicadeza exploramos este pequeño tesoro terrenal.
Volvemos a la sala principal, donde hay un pequeño Belén justo en el centro y buscamos en el otro extremo la otra galería, la entrada es una gatera y Rafel intenta entrar pero si no se quita material no podrá hacerlo, hemos mirado la topografía y se ve bastante estrecha así que dejamos sin explorarla, tampoco hemos leído comentarios espectaculares sobre ella.
Y la remontada…
En realidad, es una cuestión de paciencia y tenacidad, sube Rafel primero y mientras aprovecho para grabarlo, alguna foto y disfrutar de la sugestiva soledad en la oscuridad de las profundidades. Van pasando los minutos y finalmente Rafel se convierte en un punto de luz lejano hasta que dejo de verlo y oírlo, está fuera. Es mi turno.
Recompongo la maraña de cuerdas que hemos dejado al final de la cuerda de ascenso para hacer contrapeso y evitar el “chicle” al subir, tengo que deshacer algún nudo porque no alcanzo a ponerme el “Croll”, me cuelgo y al volver a atar cuerdas por debajo de mí me hago daño en la muñeca pero empiezo a subir, no queda otra.
Ahora con más tiempo, me dedico a mirar las paredes sin embargo el pozo es grande y la luz no me alcanza para verlo todo perfectamente, tampoco veo donde puede estar la entrada a la galería colgada ni veo ninguna cuerda fija que lleve a ella.
Después de mucho esfuerzo, en parte por la ausencia de técnica, consigo ver la luz y a oír a Rafel dándome ánimos.
Muy felices de haber explorado esta magnífica cavidad aunque lo cierto es que tardaremos en volver, o mejoramos la técnica o subir 49 m de una tirada se nos ha hecho muy intenso, Rafel en broma dice que si llega a tener 50 m ya no lo hace.
Desmontamos las instalaciones y decidimos ir sin dudarlo a la otra sima, más modesta en cuanto a tamaño y formaciones pero también muy interesante, el Avenc d’en Roca (-30 m).
Avenc de Sant Roc (-30 m)
Esta sima está muy cerca del Avenc de Joan Cabeza, hay que volver sobre nuestros pasos para a medio camino tomar una senda de subida que recorre un torrente seco con mucha vegetación. No tardaremos en llegar a la boca de acceso del Avenc de Sant Roc.
La boca es pequeña pero también entraremos fácil, además tiene una plataforma donde apoyar los pies antes de lanzarte al vacío. El pozo aéreo es de aproximadamente 13 metros. Rafel lo ha instalado y baja primero, esta vez asomándome lo veo relativamente cerca.
Baja en poco tiempo al primer fraccionamiento, una zona cómoda y amplia donde la cavidad se divide en dos, hay un pasamanos instalado para evitar rodar por la rampa.
Bajamos primero hacía la sección “a” (mira topografía), ponemos cuerda para mayor seguridad, especialmente para ascender.
Bajamos y disfrutamos de las formaciones, nos lleva hasta la profundidad – 22 metros, visitamos una pequeña sala dentro de este pozo y volvemos a remontarlo.
Llegamos de nuevo a la profundidad de – 13 m, aquí hay una instalación para bajar el pozo más largo, de -16 m con 4 m de ancho, también recubierto de fauna (sobretodo arañas) y formaciones. Instalamos la cuerda y bajamos sin más, ya hemos calentado después del Avenc de Joan Cabeza.
Un Belén con sus figuritas nos espera en el fondo y una salamandra también, no queremos dejar nada por ver, y seguimos por una cuerda fija que nos lleva a otra sala. Hay un curioso pozo con una bonita colada como formación y un puente de roca que hay que superar para bajar, necesitamos cuerda así que montamos un pasamanos y bajamos por esta chimenea con formaciones, abajo la sala no es grande pero lo suficiente para estar cómodos.
Ahora sí, hemos visto todos los recovecos de esta cavidad y nos disponemos a subir, mientras desinstala y recupera material Rafel, empiezo a subir. El Avenc de Sant Roc es mucho más pequeño que el Avenc d’en Joan Cabeza pero al final hemos dedicado un tiempo similar.
El día de hoy ha sido impresionante, no me ha dejado indiferente, empiezo la semana con tremenda felicidad, no me puedo creer los detalles tan emotivos que me ofrece la naturaleza, sin embargo, hoy me ha parecido observar de nuevo las cavidades algo secas, Cataluña está en sequía extrema que dura meses, esperemos ver su fin en esta primavera.