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Una joya de la naturaleza en Brasil
Parece increíble pero en un país dónde está la mayor selva tropical del mundo y bañado por abundante agua encontramos este maravilloso contraste en la naturaleza, las dunas blancas de arena fina en el Parque Nacional de Lencois Maranhenses.
Este desierto tropical se encuentra en la región brasileña de Maranhäo, al noroeste del país. Dunas de arena blanca y lagos de agua cristalina conforman este escenario hermoso. El Parque Nacional de Lencois Maranhenses tiene 300 km2 y las dunas se encuentran en la costa tan blancas que ciegan con su brillo durante más de 50 km.
Más curiosidades de este “desierto” tropical
Los lagos cristalinos de agua azul que vas encontrando en las dunas de arena blanca del desierto de Lencois Maranhenses, es fruto de
las abundantes lluvias de la zona, se crean estos charcos naturales que le dan un aspecto realmente curioso, además de ser un “desierto” con mucho agua. Si que es cierto que estos lagos desaparecen en época de sequía, pero en temporada de lluvias volvemos a sorprendernos con este resurgimiento natural. A pesar de todo, las lagunas es la casa de varias especies de peces, tortugas y otros crustáceos.
Es fantástico ver como despieta, año tras año, la vida en la época de lluvias, especialmente alrededor de las lagunas es latente e intensa después del largo letargo enterrada en la arena como los huevos de peces.
La Laguna Azul en el desierto inundado de Lencois Maranhenses
Muchas aves como el Marreca de asa azul o el Maçarico esperan del cielo la caída del agua para revivir ya sea en el lago más famoso del parque nacional, la Laguna Azul o en los manglares fronterizos del parque dónde hay crustáceos para alimentarse.
El encanto de lugar es en parte a la poca accesibilidad que tiene, no se trata de un lugar con muchos servicios turísticos aunque por otro lado puedes disfrutar del encanto autóctono de las pequeñas aldeas y la comida tradicional de la zona. Descubre un sitio singular para recordar.